El día sábado, en el último partido del año para ambos equipos, el Saca hizo de local en el estadio del Deportivo Chapuy frente a ese mismo rival. El partido terminaría siendo suspendido por el árbitro Luciano Sedano que argumentó falta de garantías cuando en el partido corrían los casi 30’ del complemento, y el encuentro iba 2-1 a favor de Sacachispa y el Depo Chapuy tenía un penal a favor para igualar el encuentro.
El partido corrió siempre por los carriles normales de juego, el Depo tuvo un buen primer tiempo y pudo haberse ido con algún gol más al descanso pero erró demasiado y le permitió al Saca, que en el segundo tiempo salió y en dos golpes dio vuelta el resultado. Minutos antes del 2-1 de Sacachispa, el árbitro obvió un penal clarísimo para Chapuy, lo que luego intentaría compensar y el elenco venadense reclamaría efusivamente todas sus decisiones.
Cuando cobró el penal previo a la suspensión, la mayoría de los jugadores del Saca lo rodearon y en ese momento Sedano llamó a la policía para que lo proteja, y en el momento que los de Venado intentaban abandonar la cancha y el partido por sentirse perjudicados, el colegiado pita el final del mismo, suspendiendo el cotejo por falta de garantías, diciendo que recibió amenazas de todo tipo y no sentía seguridad en terminar el encuentro. Habrá que ver su informe y que decidirá el tribunal de penas de la Liga Venadense, en un partido que era solo para completar el fixture y ni siquiera se terminó en la cancha.
