Con fondos nacionales, provinciales y comunales generan estrategia de conjunto
“Las políticas de abordaje sobre la problemática de niñéz y familia que se vienen desarrollando desde la Comuna de Carreras desde 2003 fueron siendo cada vez más abarcativas”, dicen desde esa entidad. “Antes venía una trabajadora cada 15 días y con esta gestión no solo se creó el área de acción social con dos profesionales, sino que se trabajó para construir una verdadera estrategia de intervención, desde lo interdisciplinario y articulando planes nacionales, provinciales y locales”, remarca la Licenciada en Trabajo Social Ivana Angellini. Angelini trabaja junto a Germán Battista desde el inicio de su gestión como Presidente Comunal de Carreras, y es quién articula un complejo esquema de trabajo en materia de desarrollo social que combina planes nacionales, estrategias locales y herramientas provinciales. “No importa cuál es el origen de la financiación, lo importante es que los planes y estrategias estén alineadas con la nueva concepción en materia de desarrollo social que pone en el centro de la escena a los niños, niñas y adolescentes, y los consagra como sujetos de derechos; y coloca al estado en la obligación de garantizar esos derechos. Desde la Comuna hemos implementado desde un centro intercultural como el Raíces, donde trabajamos a contra turno de las escuelas y con herramientas de educación no formal, hasta un programa de “acompañantes” que caminan junto a las familias en problemas concretos y cotidianos, hasta que se revierta esa situación. Allí, en Raíces, asisten 25 chicos en este momento, con trabajadores de ciencias de la educación y maestros de arte. Combinamos el trabajo con la comunidad Mocoví de Carreras, con recursos comunales y algún aporte de la provincia”, señala. Al desarrollo del Centro Intercultural Raíces, donde funciona además una huerta, un comedor, donde se interactúa con otros talleres y espacios de formación; se le sumó el desarrollo del programa de “acompañantes”. “Se trata de una vecina que recibió formación de los profesionales del gabinete interdisciplinario de la Comuna (compuesto por un abogado, una trabajadora social y un psicólogo) y que recibe un monitoreo constante por parte de este equipo”, destaca. La labor del acompañante consiste en fortalecer la intervención del estado en determinadas situaciones de conflictividad, transitando desde lo cotidiano el proceso de fortalecimiento subjetivo de los miembros de la familia, hasta que ese acompañamiento ya no sea necesario. Esto es: el trabajo es para mejorar esa situación de conflictividad. “Acá en Carreas tenemos a Mirta que, por ejemplo, acompaña a los padres en su relación con sus hijos, fortaleciendo actitudes, costumbres o conductas que puedan revertir una situación de vulneración del desarrollo de los chicos. Y así Mirta, por ejemplo, trabajo con determinados grupos familiares acompañando a los chicos a la escuela, a los padres a las reuniones de padres, trabaja asistiendo a las familias para que estos se integren por ejemplo a las actividades deportivas. Es una hermosa experiencia”, dice Angelini. “Mirta se ha transformado en una referente en la comunidad”, agrega satisfecha. Este tipo de intervenciones han durado desde 4 meses hasta 3 años. “Depende los casos”, señala. 
Todo el trabajo es monitoreado por los profesionales de la Comuna. La acompañante recibe un incentivo económico para cumplir su tarea. La experiencia es novedosa y constituye un desafío. “Finalmente, lo más nuevo, es una idea que surgió desde la escuela del pueblo y que consiste en hacer un registro de voluntarios que tengan deseo de ayudar a chicos que puedan tener situaciones de problemas de aprendizaje, y los reciban en sus casas. Allí trabajan con los chicos para que hagan sus tareas, estudien; y al mismo tiempo interactúan. Se trata en su mayoría de ex docentes, personas que están atravesando una situación de soledad o que simplemente tienen deseos de colaborar. Desde la Comuna chequemos, controlamos, monitoreamos junto con la escuela todo el proceso. Poniendo en el centro de la escena las necesidades de los chicos”, dijo. “Es decisión política de Germán (Battista) que trabajemos de esta forma. Desde todas las áreas, combinando todos los programas y recursos, y con la Comuna de última garante. Para generar una sociedad más justa e inclusiva, para apostar a construir de este mundo un sitio más saludable; los niños y los afectos, los lazos, son la clave”, concluyó.
