En las últimas horas hubo dos policías protagonizaron siniestros entre móviles policiales. Se trata de casos de una saga que se fue multiplicando el último tiempo al calor de los discursos que tienden a reforzar unilateralmente la necesidad de mayor patrullaje y persecución al delito callejero y que en varias ocasiones derivaron en episodios trágicos que incluyeron la muerte de algunos de los involucrados.
El exdefensor Público Provincial, Gabriel Ganón, dialogó con PUEBLO Regional sobre los repetidos casos de accidentes de móviles policiales que terminan trágicamente. Al respecto, el abogado dijo que se debe “un poco a la impericia y un poco a la negligencia” y explicó que “hay una falta de evaluación de la policía para la función que van a cumplir, no cualquiera puede estar al volante en un patrullero”.
En ese sentido, apuntó a la “poca capacitación” y a “no hacer academia para saber cómo actuar en situaciones límites” y señaló que “todo se improvisa y la falta de planificación genera estas consecuencias”. Además, dijo que los policías trabajan en “condiciones deplorables” y que no se los adiestra. “Todo el mundo se envuelve en la histeria generalizada de la guerra contra el delito”, afirma, y destaca que los efectos podrían ser incluso mucho peores.
Desde el gobierno provincial afirman que se cambio la instrucción policial y se mejoraron las condiciones formativas de las fuerzas de seguridad. “Eso es absolutamente mentira”, dice Ganón, “las pruebas están al canto, la catástrofe seguritaria que hay en la Provincia, con involucramiento en todos los delitos, jefes policiales detenidos como narcotraficantes, ellos son los que decían que Hugo Tognoli era un preso político”.
“Toda la población sabe que el pseudoprogresismo santafecino generó una catástrofe seguritaria y social y convirtió a la policía santafecina en una de las más peligrosas del país, por su involucramiento con el narcotráfico y por su negligente actuación al perseguir los delitos”, sentencia, y destaca la “proliferación del mercado de armas del cual participa la Policía de Santa Fe”.
Recientemente, Ganón presentó una investigación conjunta con el fiscal Murray sobre le caso de Franco Casco, un joven detenido arbitrariamente por la policía en Rosario que apareció muerto en el río Paraná. “Es un caso que tiene involucrado a casi 30 policías en la desaparición forzada, y el cúmulo de irregularidades, de encubrimiento político y judicial fue notable. En su momento, el gobierno y la fiscalía decían que Franco Casco estaba vivo, y siguieron diciendo eso hasta que apareció el cuerpo en el río. Después adulteraron las pruebas. Es un escándalo de magnificas proporcionen que involucra desde la prensa hasta los fiscales y jueces”, aclara.
En ese sentido, estima que el año que viene se realizará el juicio basado en el trabajo en la fiscalía federal y que espera que permita revelar estos desmanejos. “Hay muchísima improvisación y los gestores de la seguridad se terminan beneficiando con ese funcionamiento lamentable y tienen cobertura mediática de su propia negligencia. Los ministros de seguridad que tuvieron gestiones lamentables provocaron una catástrofe, con un discurso que amplificaba el comportamiento ilegal de la policía porque convalidaban la violencia y después se movían para encubrirlos con sus acciones presionando a jueces y fiscales. La doctrina Chocobar antes de Bullrich la aplicó el gobierno de Santa Fe”, rubrica Ganón.
Finalmente, plantea que el accionar de la policía debería ser «racional, planificado y no violentar las normas de tránsito para efectuar una persecución a lo loco o disparar en medio de la ciudad causando muertes, esta locura generalizada impacta en el personal policial que considera que puede violar todas las normas porque es policía».