(PR/NM/SC) Los hermanos de Juan Carlos Salinas, estuvieron esta tarde en su casa de Pringles 88, tras anoticiarse de su deceso. “Lo único que pido es que el homicida quede preso toda su vida, para que mi hermano descanse en paz. Somos nacidos y criados en este barrio, un tío vive en la esquina, mis abuelos vivían en la otra y viene un h..de p.. que hace dos meses compró una casa y hace este desastre”.
“Me enteré que le ofreció plata a mi hermano para que levante la denuncia, pero como le dijo el juez, por más que sea el dueño de Vaca Muerta, no todo se arregla con plata. Y ahora espero que se haga justicia y quede guardado toda su vida, por eso agradecemos el trabajo de la fiscal que lo encerró”, señaló Daniel Salinas.
Por su parte Miguel, recordó que el conflicto comenzó el 25 de octubre cuando Kevin P, le disparó cuatro tiros y uno de ellos pegó en el parante de la pick up que estaba estacionada en el lugar, “él alcanzó a meterse adentro, sino lo mataba. Luego lo quiso atropellar y lo encaró contra la pared. Al otro día vino y lo mató. Ese tipo tiene que estar preso”, sostuvo.
“Hace unos días lo trajeron al banco, con custodia, él hace su vida y yo a mi hermano no lo tengo nunca más. Esa mañana estuve con él y hacía dos minutos que me había ido y vino este y lo apuñaló”, sostuvo.
El 8 de noviembre pasado Juan Carlos Salinas fue apuñalado en el hígado por Kevin P. a quien había denunciado por que le había efectuado disparos días antes y luego amenazó a él y a su hijo Jesús.
El herido fue intervenido quirúrgicamente en el Hospital A Gutiérrez, y con el paso de los días nunca mejoró, hasta que el lunes pasado la fiscal en una audiencia informó que sufría muerte cerebral.
