(PR/Giuliana Ghignone) Otra vez, Felipe y Santiago enseñan a todos una gran lección de vida. Una amistad que llegó a los portales nacionales por su grandeza. Una historia que motiva a todos por la empatía, por la esperanza de un mundo distinto donde cada uno “sume” a partir de sus diferencias.
Son amigos desde preescolar, tienen 8 años y toda una vida de aventuras juntos. Los une la música pero también su pasión por el fútbol y todo aquello que la vida les presente como desafío. La mamá de Felipe es quien, a través de su cuenta de Instagram, comparte momentos de estos niños que transitan su infancia en la localidad de Teodelina y días atrás, capturó el momento donde Felipe jugaba a ser director técnico de su amigo que a causa de una discapacidad motora depende de una silla de ruedas y le explicaba estrategias futbolísticas, que perfectamente se aplican a la vida. Rápidamente la publicación recibió miles de comentarios, seguidores sorprendidos y emocionados por el vínculo, por esta amistad que no sabe de barreras ni de limitaciones, ellos juntos todo lo pueden.
“Pensas que te la van a tirar para allá y no… te la van a pasar por arriba” explica en su rol de director técnico el pequeño. “Esta metáfora parece hablar sobre las expectativas y la realidad de la vida. Sugiere que a veces esperamos que las cosas sigan un camino específico pero la realidad puede ser desalentadora y diferente a lo anticipado”, comentó su mamá en las redes para luego sumar “la parte de “dar vuelta rápido” indica el deseo de adaptarse rápidamente a las circunstancias desafiantes. Sin querer el destino hizo que Feli dijese esas palabras.
“Total el gol lo vamos a meter igual”, concluye en su explicación el teodelinense acompañado por su amigo que asiente con atención mientras se deja guiar por la cancha detrás de una pelota con la confianza plena en su “compinche”.
