(PR/GiulianaGhignone) Rossana Münger es una reconocida artista venadense que, por medio de sus obras enmarcadas en la muestra “Los niños tienen derechos”, interpela a niños y adultos.
“Como artista descubrí a través de los años y distintas experiencias que tenía un propósito: ser voz, contar, decir, comunicar que los niños tienen derechos”, contó a Pueblo Regional la artista venandese que desde el 2014 visita escuelas, instituciones, museos para que niños y adultos conozcan y reconozcan.ñnsus derechos. “Las obras están inspiradas en los artículos de la Convención de los Derechos del Niño de 1989, donde cambió profundamente el paradigma de la infancia. El niño no es propiedad de nadie es un individuo que tiene derechos y responsabilidades y forma parte de una familia y de una comunidad. Tiene derecho a tener un nombre y un hogar, a poder jugar y estudiar, a asociarse y a expresarse en libertad. Debe ser protegido de toda forma de abuso, violencia, abandono y explotación”, explica Rossana.
Así, en cada encuentro o taller, las obras de arte van al encuentro de los más pequeños y ellos tienen la posibilidad de ver una muestra completa. “La mirada de los niños que habitan mis telas, las emociones que transmiten, sirven de conexión con pequeños y adultos. Esta vivencia es un disparador para que los niños se expresen: hablan, opinan, escuchan, pintan, dibujan. Cada visita es especial y única. Una experiencia que llevo para siempre en mi corazón”, relató Münger.
“Desde muy pequeña sentí la necesidad de expresarme a través del dibujo, la pintura y la escritura. Pero me llevó tiempo entender que esa pasión que sentía podía llegar a los demás, que era posible transmitir con mis obras y en mi lenguaje todo el bagaje de sentimientos, sueños y emociones que plasmo en ellas y que me hace tan feliz. El arte, es el motor de mi vida, es el ancla que me permite mantenerme en eje y las alas con las que puedo volar”, expresó la artista.
“Sueño que los niños sean respetados y protegidos, que sus derechos no sean vulnerados, que puedan creer, crear, imaginar, soñar… Que disfruten su infancia sin etiquetas y con igualdad de oportunidades. «Abrigales la infancia y no pasaran frío el resto de su vida»”, concluyó.
