(PR-Pablo Tomás Almena) El año 2021 marcó la irrupción de la televisión profesional en el fútbol del departamento General López. El acuerdo entre el Multimedio Grupo Straffela y la Liga Venadense de Fútbol significó una interacción doble entre el medio de comunicación y el espectáculo del fútbol regional: por un lado una importante bocanada de recursos frescos para los clubes de la “B”, en un momento muy difícil de sus economías, como fue el 2020-2021 y la pandemia; y por el otro darle al balompié regional los aires del gran show del fútbol de primera, el charme de las grandes ligas.
Banners, banderas, promotoras, movimiento de equipos, profesionales de la comunicación, y una producción y planificación que no tienen antecedente en la región. Un nuevo corolario del espectáculo del fútbol que multiplica su atractivo y hace a los protagonistas sentir que no están tan lejos del fútbol grande. Un premio al enorme esfuerzo que hacen las comisiones de los clubes para sostener a las instituciones: sentirse parte de algo de primera.
Los clubes de la Liga Venadense sobreviven con enorme dificultad la ausencia de políticas públicas de fomento deportivo. La inmensa mayoría subsisten a duras penas, en una especie de condena de elegir entre reducir sus actividades para quedar lo menos en rojo posible, o asumir el desafío-condena de vivir endeudados, de prestado (o de favor) y pagando deudas con el trabajo de los miembros de sus comisiones directivas.
Estos dirigentes acaban siendo con su trabajo en polladas, rifas, chanchos móviles, torneos comerciales, el sostén de todo. Los únicos ingresos estables de las instituciones son las entradas a los partidos, alquiler de algún salón (algunos hasta venden servicio de catering para eventos), sponsors (muchos de ellos por ser simpatizantes), y donaciones. En los años de pandemia, la mayoría de estos ingresos quedaron en cero.
En este contexto, la llegada del acuerdo con el Multimedio Grupo Straffela significó para cada uno de los clubes un aporte dinerario de 60 mil pesos, y mediante este ingreso el saneamiento del vínculo económico de las instituciones deportivas y la Liga Venadense.
Además les aportó a los clubes el afrontar el pago de ambulancia, arbitraje y policía, que son costos fijos inevitables para los clubes en cada partido. A estos aportes se le suma la inversión en infraestructura que realiza la empresa televisiva para bajar el servicio de internet que hace posible la transmisión. Esa es una prestación que queda instalada en cada club.
Derechos federativos
La otra gran esperanza del fútbol regional suele ser la ilusión de que los derechos federativos de aquellos jugadores que por sus virtudes individuales logran consagrarse, se reglamenten para que regresen en alguna medida a las arcas de las instituciones que los formaron. Pero no se vislumbra en el horizonte su implementación.
Mientras tanto, la actividad de cada club de pueblo y ciudad de General López y Caseros, queda supeditada al esfuerzo de los miembros de las comisiones, dejando en evidencia el enorme déficit del Estado que no se hace cargo (como debería) de la “enrome función social que desempeñan los clubes”, que tanto se menciona de la boca para afuera.
En este contexto, las necesidades siguen buscando soluciones, y nuevos convenios del tipo Multimedio Grupo Straffela-Liga Venadense se asoman en el horizonte. Hasta que el Estado por fin le asigne a los clubes el rol que merecen, y les otorgue financiación propia, autónoma, proporcional a la relevancia del rol que desempeñan; la vida de las instituciones deportivas y su salud económica quedará liberada a la voluntad y entrega de los dirigentes y simpatizantes; y, en el mejor de los casos, a otras opciones de negocios como los que la televisión le trajo a la Liga en 2021.
