La situación de la salud en Venado Tuerto viene atravesando momentos de suma complicación a partir de la falta de guardias médicas y de atención para urgencias, dos aspectos que fueron denunciados por el concejal del Pro Francisco Paris, que viene siguiendo el tema y respaldando el proceso de reorganización del escenario local con la venta del sanatorio Castelli. El reclamo público para la revisión del sistema de salud cobra dimensión de urgencia ante saturaciones y colapsos.
“Acá se encendió una señal de alarma de la situación de salud de toda la región. Hace seis meses que se enviaron resoluciones, no solamente con diagnóstico de la situación. Hace un año que venimos con la puja para solucionar el tema de un sanatorio, que no es que dejó de funcionar y punto, sino que hay a cargo un montón de personas, afiliados a Pami, a Iapos, cada sanatorio, al dejar de funcionar, hace que se sobrecarguen otros sistemas”, comenta Paris.
En relación a la actuación de los concejales y funcionarios públicos para articular medidas necesarias que agilicen los procedimientos, el edil del Pro agrega: “tratamos de mejorar la comunicación entre todas las instituciones para que cuando estemos en déficit en una, se pueda colaborar desde las otras. Nos encontramos que hay una institución con muchos problemas de funcionalidad y otra que está en momentos difícil, vemos que hay poca colaboración y especulación por una supuesta venta. Los negocios son cosas particulares hasta que empiezan a tocar los derechos de otros, y acá hablamos de instituciones de salud”.
El proceso de transferencia del sanatorio Castelli entró en un cono de incertidumbre. Paris fue uno de los que más cerca estuvieron de la mesa de negociación. “Yo colaboré para que haya buena voluntad del hospital Alejandro Gutiérrez para aceptar a los pacientes. También en el tema de los traslados, para cubrir baches en la ciudad. Se habló con el Beroiz, que colaboró muchísimo. Empezamos a investigar porque no se pasaba del casi en la negociación, y era una cuestión de negocios, empresarios que tenían parte del paquete de negocios. Se está jugando una torta importante, no es solamente un edificio”, desliza.
En ese marco, el panorama de la ciudad tiene serias complicaciones de organización. De todas formas, no abundan los municipios que cuenten con un plan de salud coordinado entre sector público y privado. En esos términos, la conformación y funcionamiento de la Mesa de Salud es una gran avance, pero aún restan deudas pendientes. “Institucionalmente, para cubrir lo que pasa día a día, la demanda espontánea, necesita de respuestas efectivas, ahí es donde está la mayor falla, por eso yo le reclamo a la nación y a la provincia. Hay que generar una espacio de consulta para demanda espontánea, necesitamos que todos los actores juguemos”, termina Paris.
