Las petroleras postergaron quince días el aumento de combustibles que estaba previsto para comienzos del 2023. La decisión fue acordada entre las distintas firmas a cargo de la refinación de petróleo en el país que tenían autorizada la suba del cuatro por ciento.
Precisaron que «el sector de refinación en su conjunto no aplicará un aumento en los combustibles en lo inmediato», sino que el aumento previsto del 4% «sería luego de la segunda quincena de enero».
En el sector de refinación participan YPF, Raizen (Shell), Pan American Energy (PAE) y Puma Energy, entre otras empresas.
En noviembre pasado, el sector acordó con el Gobierno nacional participar del programa Precios Justos con aumentos mensuales de 4% en diciembre, 4% en enero, 4% en febrero y 4% en marzo.
Fuente: Télam