(PR/Norma Migueles) Dentro de la campaña de promoción de la reforma de la Ley Previsional en Santa Fe, el gobierno apuntó directamente al Poder Judicial, respecto a los altos sueldos de los magistrados considerándolo un sector “con privilegios”. Sin embargo, desde el Poder Judicial, aclaran que la cosa no es tan así.
Al respecto el camarista Tomas Orso, quien aclaró que su opinión era personal ya que no se encuentra agremiado al Consejo de Magistrados y Funcionarios del sur, explicó que la denominada Ley de Enganche, que permite que los jueces provinciales reciban las mismas mejoras salariales que sus pares del fuero federal, data de los años 60 y que otros “privilegios” no alcanzan a los provinciales.
“Cuando se habla de equiparación, debemos aclarar que la misma no es total, porque en Santa Fe, cuando hay cobertura de vacantes los jueces federales cobran un plus y en Santa Fe no. Hay un régimen distinto de licencias, para ellos son más extensas y con goce de sueldo. De hecho, los tiempos en los que tramitamos nuestras causas, difieren totalmente de los del fuero federal que suelen durar hasta décadas”.
“Nosotros prestamos un servicio distinto al que brinda el Poder Ejecutivo y quienes estamos hace tiempo en el Poder judicial recordamos lo deficiente y complicada que era la labor tribunalicia antes del 94. Había litigios entre funcionarios y jueces con el Estado Provincial, con amparos por la intangibilidad de los sueldos y demandas que hicieron millonarios a varios estudios en perjuicio de las arcas públicas”, destacó Orso.
“Hoy vemos que quiere retroceder a un régimen carente de previsibilidad respecto a los haberes que volvería a generar tensiones entre diferentes actores, tema que debería evaluar el Poder Ejecutivo al pensar en modificar un sistema que, por otra parte, no es ajeno a la crisis general. De hecho, los aumentos que se dieron los últimos años al Poder Judicial desde el Ejecutivo nacional están por debajo de la inflación”, planteó.
“La designación de jueces pasó por distintos sistemas, discrecional hasta 2007, después pasamos al sistema de concursos vinculantes por orden de mérito, luego se transformó en una terna que no era vinculante y ahora estamos volviendo al discrecional. Esto lo dijo el ministro de justicia quien manifestó que buscan jueces con determinados perfiles y también para incorporar como ministros de la Suprema Corte de Santa Fe, indicó Orso.
Para luego evaluar, “todo esto contribuye a acrecentar la falta de credibilidad en la justicia. Habría que ver de esa valoración que hace la sociedad cuánto es responsabilidad del Poder Judicial y en cuanto al Poder Político que, con este tipo de cuestiones, genera desconfianza”.
En su valoración el magistrado admitió que el poder que integra “como se suele decir es el menos democrático de los tres poderes que conforman el sistema republicano, porque a sus integrantes no los elige en forma directa la gente como a los legisladores o a los titulares de los Ejecutivos. Además, mientras gocemos de buena salud tenemos permanencia indefinida, un ejercicio vitalicio en la función. Esto también nos obliga a tener la mayor legitimidad posible”, consideró.
Para luego con mirada crítica deslizar, “debemos estar abiertos a los cuestionamientos que se nos hagan y apoyar cuando, como ahora, se promueven modificaciones para mejorar la calidad del servicio. Es más, tampoco veo mal si se nos quisiera auditar externamente, porque siempre podemos hacer mejor las cosas, como tampoco veo mal que se evalúe si el cargo vacante es necesario cubrirlo. Desde este lugar siempre proponemos cosas para mejorar, como por ejemplo el acortamiento de la feria judicial y celebramos si esto significa ser más productivos y un mejor servicio de justicia”, subrayó.
