La recepción de las medidas del gobierno nacional en la región es un tema de discusión desde apenas comenzada la reorientación institucional que imprimió Cambiemos desde su llegada a la Casa Rosada. Las variables económicas arrojaron números negativos en todos los frentes y el malestar social fue creciendo de la mano de decisiones que afectaron considerablemente la capacidad de consumo y el nivel de vida de la gran masa de población. De esa manera, lo que abundan son especulaciones que intentan despejar el panorama para uno u otro lado.
La encuesta que la consultora Servicios Estratégicos realizó en distintas localidades de la región aporta algunos datos para tener en cuenta la valoración del gobierno. Alrededor del 69% de los consultados considera la gestión como mala o regular, lo que indica que las expectativas que sostuvieron la campaña electoral y llevaron a Mauricio Macri a la presidencia, con victorias amplias en la región, ha ido deteriorándose hasta acumularse en imagen negativa a partir de las promesas incumplidas y el sesgo elitista de sus políticas.
Solo un 20% señaló que su familia se encuentra en mejores condiciones que el año pasado. Mientras que un 30% afirmó que está peor y el 45% que no advierte modificaciones. Sin embargo, ésta última franja, consultada sobre las proyecciones al corto plazo, agregó que se avizoran en declive y que ya fueron necesarios los recortes en recreación, alimentación, salud y educación para poder mantener esa misma situación familiar.
De cualquier manera, un dato llamativo que los 730 casos relevados en la encuesta arrojan es que alrededor del 30% de los consultados, pese a las complicaciones económicas a las que se vieron arrastrados, elegirían un candidato de Cambiemos en las próximas elecciones.