(PR/Norma Migueles) El 28 de septiembre de 2023 la ciudad de Venado Tuerto se vio conmovida por el homicidio de una mujer. El hecho ocurrió en las primeras horas de la mañana cuando aún el sol no había salido, en Chile y Cerrito. La noticia se expandió rápidamente al ver los móviles policiales y una gran cantidad de uniformados en el lugar. Frente a la casa estaba el marido de la mujer, con las manos en los bolsillos, intentando explicar que su esposa había sido víctima de un robo.
La primera versión fue que a Stella Eidner, una enfermera que prestaba servicios en el Hospital A. Gutiérrez y que, como cada mañana, salía con ese destino aproximadamente a las 6:00, la mataron para robarle la moto. Stella recibió numerosas puñaladas y murió desangrada en los brazos de su hijo quien salió a socorrerla cuando escuchó los gritos. Contra el muro quedó la moto.
El adolescente desesperado pidió auxilio y un vecino fue a buscar al padre, que trabajaba en una cerealera a unas cuatro o cinco cuadras del domicilio. El hombre llegó al rato, entró se cambió y luego se quedó en la vereda con aspecto compungido, mientras la policía trabajaba en el lugar. Luego de un rato se fue a casa de su suegra y se llevó al hijo.
En el lugar se hicieron presentes los fiscales Matías Merlo, Ivan Raposo, Horacio Puyrredon y Eduardo Lago. Trabajó el CRE, AIC, Criminalística y Cría 12. El supuesto hecho de inseguridad causó conmoción y temor porque esas cosas no suceden en Venado. Hoy la causa la tramita la fiscal Andrea Cavallero.
Un rastro de sangre
Nadie vio, ni escuchó nada, pero en el registro de las cámaras de un vecino los investigadores vieron a un hombre agazapado detrás de unas bolsas de material de construcción y luego salir corriendo hacia el norte por Cerrito.
Ya había salido el sol y mostró con claridad un reguero de sangre que iba por Cerrito al norte y terminaba en 2 de Abril. Las cámaras de Ruta 8 mostraron que minutos después un coche blanco igual en marca y detalles que el que tenía el esposo de Stella pasaba por la Ruta 8 e ingresaba a una empresa cerealera ubicada en zona de vías.
El conductor habló con el guarda, se dirigió a su auto de dónde sacó un bulto y lo llevó hasta un galpón en desuso que sirve de depósito. En el ingreso había gotas de sangre, en la llave de la luz también. En un cajón hallaron un bulto que tenía un pantalón, guantes de trabajo y una gorra con manchas de sangre.
Unos 7 u 8 minutos más tarde el mismo auto blanco conducido por el marido de Stella llegó a Cerrito y Chile, tenía una mano lastimada, dijo que se descuidó en la trituradora. Se cambió en la casa y detrás de sí dejó un reguero de sangre hasta el baño. Consoló a su hijo y recibió el pésame de los conocidos y vecinos.
El femicida
En horas del mediodía la Fiscalía y la policía tenían la teoría del hecho: Stella fue apuñalada por su esposo. Días después se realizó la audiencia imputativa. Antes y tal como lo establece el Código uno de los hijos habló con el juez y le dijo que su familia era normal. Todavía estaba en estado de shock: en pocas horas perdió a su madre y a su padre.
Durante la audiencia, el fiscal Raposo dio detalles de cómo sucedieron los hechos, fue demasiado para los hijos de Stella y la familia que trataba de contenerlos. El femicida permaneció inmutable ante el llanto sin consuelo de los chicos.
Los compañeros de trabajo de Stella hicieron una guardia de honor frente al Hospital A. Gutiérrez despidiendo con muestras de profunda emoción sus restos.
La causa
Según informaron desde Fiscalía se están terminando las últimas entrevistas. Hay más de 15 (entre familiares, amigos, compañeros de trabajo de él), ya se peritaron los teléfonos, análisis de registros fílmicos, recorrido de canes, testimonio en Cámara Gesell de los 2 hijos de Stella.
Ayer empezaron con la apertura de evidencias de los efectos secuestrados para análisis de ADN para cotejar con los perfiles genéticos en las muestras, en este punto se aclaró que los mismos estaban desde febrero en el Laboratorio Genérico Forense.
Tras la recepción de estos resultados, la causa estaría en condiciones de elevarse a juicio.
