(PR/Norma Migueles) En horas de la tarde de ayer, el grupo Agite Feminista realizó una intervención en el frente del Colegio Normal, en rechazo a la imposición del nombre de un ex docente a un aula de la entidad educativa, atento a que habría ejercido violencia de género intra escolar y fuera de ella.
Las feministas pegaron afiches en la vereda y manifestaron que siguen firmes en el cometido de rechazo absoluto a las acciones violentas contra la mujer. Indicando que el objetivo es evidenciar en cada lugar donde se vulneren sus derechos y sobre todo en una entidad educativa donde se están formando futuros docentes.
La docente, ya jubilada, Margarita B., oportunamente elevó una nota a la dirección del Instituto de Profesorado Nro7, haciendo el mismo planteo.
Entre otros conceptos planteó: “quiero manifestar mi asombro y, por qué no, mi preocupación, al observar que ciertos espacios áulicos de esta querida casa de estudios que, además, abriga tres instituciones de distintos niveles, declarado patrimonio histórico, entre tantas, son objeto de homenaje a docentes”.
Y en esta línea la docente se pregunta, al momento de colocar el nombre de una persona en un espacio público “qué lugar ocupan las acciones no privadas vinculantes con alumnos y colegas y que puedo demostrar, que no condicen con el respeto por la mujer, máxime en épocas donde la lucha por los derechos vulnerados de las mujeres son tan caros a nuestro acontecer y deberían ser transversal a la formación docente y de extremo cuidado por quienes tienen la función de gestionar instituciones de formación docente”.
