(PR/Norma Migueles) Las bajantes de las aguas naturales tras la persistente sequía dio como resultado la aparición de objetos inéditos, algunos perdidos por los pescadores y otros cuya origen es dudoso. Esto ocurrió el viernes 24 de febrero pasado, cuando algunas personas denunciaron que había una suerte de esqueleto en inmediaciones del alteo de la Laguna La Picasa.
Tras informar al fiscal de turno Mauro Menéndez, ya pasadas las 17 el funcionario ordenó realizar un exhaustivo recorrido por el sector donde lo habrían visto.
Tras un exhaustivo rastrillaje por la zona, el personal policial halló, sobre una piedra del otro lado del Guardarraíl, en sector de retorno de Ruta Nacional 7 km 385, un cráneo aparentemente humano, sin el maxilar inferior.
Al respecto, el fiscal Menéndez, informó que tras recibir la primera información dio intervención al personal de la AIC, para que recogiera el cráneo, que posteriormente fue derivado al Laboratorio Forense y de esa forma obtener la información fehaciente que permita establecer el origen.
“Los datos que puedan surgir del Laboratorio nos permitirán conocer edad, sexo y origen. No sabemos si son restos de data reciente, o tal vez si hasta puedan pertenecer a algún sentamiento de pueblos originarios. Especular en este momento sobre la identidad no tiene fundamento, no sabemos si es de un niño o un adulto, si es hombre o mujer y tampoco cuanto hace que esta allí y si hay otros restos” sintetizó el funcionario del MPA.
En consecuencia, por ahora la única certeza es el hallazgo del cráneo a la vera de la ruta 7 en el sector del alteo de la laguna La Picasa.
