(PR) Durante esta mañana, la veterinaria Inés Carusillo, contó sobre el trabajo llevado a cabo con el programa Orejas Verdes. Además, se refirió al precio de los insumos de uso veterinario y al aumento que sufrió la comida de los animales.
En diálogo con Pueblo Regional, la directora del Imusca, Inés Carusillo, hizo un balance sobre el trabajo en los barrios durante esta primera mitad del año.
“Desde el momento en que pudimos disponer del quirófano móvil municipal, se nos facilitó el trabajo barrial. Fue un antes y un después, aparte es lindo y cómodo que era el objetivo que tenía el intendente Leonel Chiarella, el de poder llegar a los barrios con mayor frecuencia y comodidad”, acotó.
Cabe señalar que durante esta semana, el programa Orejas Verdes se llevó a cabo en el barrio San Vicente, donde prestó servicios de castración y vacunación antirrábica, sin costo para el solicitante.
Además, destacó que lejos de reducir, se potenció el trabajo y se amplió el staff en el Dispensario Municipal y en el Imusca.
“Se sumó más gente al equipo, esto tiene que ver con responder a la demanda y generar una oportunidad y una respuesta a las necesidades operativas que tiene la gente. En definitiva, es una inversión para la salud pública, porque hay que contemplarla así, no solamente como una fuente de trabajo para los profesionales sino también para potenciar el trabajo que ya se venía realizando”.
Por otro lado, anticipó que la semana que viene estarán en el Centro de Salud del barrio Villa Casey.
Alimentos y medicamentos
La profesional también se refirió al costo desmedido de los insumos de uso veterinario. “Los valores se han incrementado, la mayoría son drogas importadas y los costos se han elevado en su mayoría”.
A su vez, hizo mención a la disminución en la calidad en la alimentación de los animales de compañía. “La gente que antes compraba comida de primera calidad ahora opta por alimentos inferiores. Eso impacta directamente en su salud”, agregó.
“Otro impacto son las medidas preventivas como las desparasitaciones rutinarias que mucha gente postergó. El problema es la calidad de vida del perro o el gato que tienen y obviamente aquellas enfermedades que son de transmisión a los humanos como parasitosis o picaduras de garrapatas”.
