A fines del año pasado el gobernador Omar Perotti anunció el reemplazo del exitoso Plan Abre por el Programa Incluir, aludiendo que ahora “incluirá” a todas las localidades de Santa Fe.
Se olvidó que desde 2018 bajo la administración del exgobernador Miguel Lifschitz, el gobierno provincial llevó adelante el plan de pavimentación de calles urbanas y obras complementarias más importante de su historia en todas las localidades del territorio santafesino (más de 3.100 millones de pesos). Es decir, el Plan Abre era un plan con un objetivo, lo mismo que el plan de Pavimentación. El Plan Incluir lanzado por el gobierno de Santa Fe, “en reemplazo del Plan Abre”, empezó a llegar a las localidades del Departamento General López, pero de manera discrecional.
Me alegra mucho por los vecinos de las comunas a las que les fue confirmada la llegada de los fondos para obras de infraestructura, como las que se enumeran a continuación: $ 15.302.000 a la Comuna de Hughes para cordón cuneta y desagües pluviales. $ 13.930.000 a la Comuna de María Teresa para el proyecto “Incluir Pueblo Viejo. $ 9.999.000 a la Comuna de Murphy para reparación y construcción de carpeta asfáltica. $ 7 millones para la Comuna de Carmen para cordón cuneta y badenes $ 5.036.000 a la Comuna de Melincué para mejoramiento de los sistemas de vigilancia $ 4.985.000 a la Comuna de Labordeboy para 3 cuadras de pavimento de hormigón, pero salvo Melincué, las otras cinco comunas son gobernadas por el PJ (de hecho, son las únicas cinco localidades del Depto.), mismo partido que gobierna Santa Fe.
El Frente Progresista reclamó que este plan se lleve a cabo a través de una ley, pero lamentablemente y como viene ocurriendo desde diciembre de 2019, muchas decisiones se toman “a criterio del Ejecutivo”.
Criterio que es arbitrario, discrecional e injusto.
