(PR/Pablo Salinas) Desde la semana pasada distintas autoridades del ámbito de la salud provincial vienen destacando que el Hospital Alejandro Gutiérrez se encuentra colapsado en la prestación del servicio pediátrico.
La problemática no es menor si se tiene en cuenta la escasa oferta de esta especialidad médica en la ciudad y la región, tanto en el ámbito privado como público, y la aparición de enfermedades respiratorias comunes de esta época del año.
“Estamos colapsados como se ve en todos lados en Argentina, y como estuvo antes en Europa. Ahora estamos teniendo casos de bronquiolitis en bebés pequeños, de entre 30 días y tres meses, principalmente”, señaló a VerTV la médica pediatra Silvina Bianco.
En el mismo sentido planteó que “estamos trabajando muchísimo, con una sobredemanda. Esto también está pasando en Rosario, Buenos Aires, y es un llamado a la comunidad para que cuiden a sus bebés, es muy importante la prevención y que tengan las vacunas completas”.
En cuanto a las medidas de prevención enumeró como principales: la lactancia materna, evitar el hacinamiento, ventilar los ambientes, si hay un adulto enfermo que utilice barbijo, y colocarse las vacunas del calendario nacional. Por otra parte, recordó que por estos días está comenzando a circular el virus de la gripe.
Por su parte, Emanuel Álvarez, médico residente del Hospital Gutiérrez, planteó que el colapso sanitario también está relacionado con “la falta de residentes, porque se elige poco esta especialidad. En el sistema de salud no se encuentran pediatras, hay muy pocos, entonces se complica darle la atención de calidad que precisa el paciente por la falta del recurso humano”.
Para tomar dimensión de la gravedad del problema, Álvarez detalló que “por día estamos atendiendo a entre 100 y 120 chicos, y durante el fin de semana se duplica esta cantidad, y todo se complica más si se trata de un fin de semana largo”.
Cabe destacar que además de la atención a los menores, los pediatras también deben brindar contención a los adultos que los acompañan, y en este marco Bianco pidió paciencia a la población y describió como es el proceso de admisión:
“Cuando llegan un admisionista les toma los datos, y después una enfermera les pregunta qué les está sucediendo, y en base a esos síntomas será atendido de inmediato o tendrá que esperar un momento e incluso unas horas. En Rosario, en estos momentos, el promedio de espera es de 12 horas, por eso queremos que entiendan que estamos dando lo mejor que podemos, con el recurso que contamos, para que todos los pacientes sean evaluados”, remarcó la pediatra.
Por último, la profesional recordó que en el sector privado de la ciudad ni en los efectores públicos de toda la región hay guardias pediátricas, por lo cual todo el servicio se concentra en el Hospital Gutiérrez.
