Con la meta de asegurar el adecuado estado de los alimentos que consumen los venadenses, la Secretaría de Control Urbano a través de la Dirección de Seguridad Alimentaria efectuó esta semana inspecciones y decomisos en distintos comercios de la ciudad.
En los últimos días se inspeccionó un autoservicio de Rivadavia y Belgrano, otro de Chile al 1100, una despensa de Falucho y Garibaldi y un kiosco de la zona de Marconi y Castelli.
Los procedimientos respondieron tanto a denuncias realizadas por vecinos como a actuaciones de rutina, y la mayoría de los productos decomisados fueron derivados lácteos y fiambres.
“Es importante que los comerciantes controlen la temperatura de las heladeras, las rotulaciones y las fechas de vencimiento de los productos, porque no se busca desperdiciar alimentos sino que estén en las condiciones adecuadas”, remarcó la directora del área, Cecilia Bongiovanni.
En todos los casos se labraron las actas correspondientes y los productos decomisados fueron desnaturalizados.
