(Pueblo Regional) Este miércoles se realizó una reunión de los principales referentes del Foro de Presidentes Comunales e Intendentes del PJ, con el gobernador electo Omar Perotti y los legisladores del partido a nivel provincial.
Lo curioso es que luego de ese encuentro de unidad partidaria, varios senadores del peronismo aprobaron el presupuesto 2020 presentado por el gobernador Miguel Lifschitz el miércoles por la tarde.
“Fue una reunión que pedimos los presidentes comunales e intendentes y delante de todo estaban los senadores que después salieron de ahí y fueron a votar el presupuesto. Esto es de una gravedad importante porque para cualquier ciudadano que quiere ver cómo va a gobernar un intendente, un gobernador o un presidente, hay que mirar el presupuesto para ver cuánto pone en educación, salud, vivienda, seguridad, obra pública, justicia. Que ese presupuesto sea de un gobernador que está a 20 días de abandonar su mandato es muy grave”, remarcó el intendente venadense José Luis Freyre.
Bajando el tema al orden local afirmó que “a nosotros no se nos ocurriría hacer un presupuesto condicionando el gobierno del intendente electo, Leonel Chiarella, sobre lo que puede o no hacer. Si después un intendente o un gobernador hace un cambio de partidas eso puede derivar en un proceso penal”.
Uno de los puntos más cuestionables del presupuesto aprobado por la Cámara alta es un incremento en las partidas correspondientes al Programa de Fortalecimiento Institucional, que son los subsidios que distribuyen diputados y senadores. Esa partida pasará, de aprobarse el presupuesto en Diputados, de 452 millones de pesos entre las dos cámaras a 2400 millones de pesos el año que viene.
El intendente Freyre sumó gravedad al hecho al afirmar que “mientras en nuestro caso cada aporte, cada movimiento económico pasa por el Concejo, es aprobado, y publicamos la declaración jurada de nuestros ingresos, esto (los fondos que manejan diputados y senadores) no se publica en ningún lugar, o sea que no se sabe qué pasa con ese dinero. Este ya es un monto absolutamente grosero, porque además se le pone plata a una persona que lo entrega discrecionalmente y que no lo rinde ni publica en ningún lado. Después hablamos de políticas de Estado, de trascender a los dirigentes de turno, de proyectos a largo plazo, de la planificación, pero la verdad que esto es casi del Medioevo”.
